Círculos transparentes se dejaron caer de madrugada, cambiantes a dorados por la mezcla de luz natural y artificial de las tristes farolas de mi calle, alterando el ritmo temprano de la vida, haciendo opaco lo que es evidente, transformando lo que puede ser posible, dando un sentido mágico al comienzo del día. Ocurrió el treinta de enero de dos mil nueve.
3 comentarios:
¿No se trata de un efecto de la cámara entonces?
Qué rara me parece esa niebla a copos. Beso
Puede ser que sea por la cámara, pero me sugirió lo que he contado y me gustó como se veían las fotos.Besos Mega.
Con esas imágenes pasa como con la pintura abstracta, que puede parecer cualquier cosa, y es más interesante la sensación que te produce que el significado de lo que representa.En este caso, desde mi punto de vista, la ficción supera a la realidad.Besos.
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