sábado, 19 de noviembre de 2011

Golpes

Wassily Kandinsky


Pequeñas alegrías

1913

óleo sobre lienzo


The Solomon
R.Guggenheim Museum
Nueva York






Desconoce porqué el color un día se le presentó provocándola para que lo moldeara, amasara y jugara con su textura materializada en una pasta a veces pegajosa, deslumbrante, cegadora, quemando el verde de sus ojos que entonces se tornaban más verdes y limpios. No tenían entonces ningún valor las monedas ni los actos sociales donde muchos se pavoneaban de su destreza, donde había que estar para darse a conocer. Cuando el zarpazo a su vanidad se presentó un día sin avisar comprendió el valor de lo efímero del momento de su inspiración mucho más rico que todos los elogios.

4 comentarios:

laindefensiónaprendida dijo...

Un gran innovador.

bambu222 dijo...

Hola laindefensiónaprendida,por desgracia no siempre se hace público o se reconoce a determinados artistas,aunque creo que al que lo es de verdad no le importa tanto como el hecho de la creación en sí.Abrazo.

Gemma dijo...

Buen -y sabio- vislumbre, el de tu personaje, Bambú. Besos para ti

bambu222 dijo...

Gracias Gemma, lo que más me importa es que ha llegado a su destino.Abrazo.