a Luis Matilla
Si miro al cielo, las nubes me amenazan con agujeros negros más allá de la apariencia de algodón. Un ojo de dios falta en la imagen con rayos justicieros como el dibujo del catecismo. El centro rojo a pesar de su pequeñez se erige en rey de este espacio por la benevolencia del severo guardián divino. Apunta su energía a mi retina. Se expande por todo el cuerpo.
3 comentarios:
que lindo lo que escribistes.....abrazo
Está estupenda esa combinación foto texto
Gianna,el cielo,me ofrece espectáculos diarios que realmente me impresionan,cuando estoy triste me consuela y si estoy alegre la alegría es más grande.Un abrazo.
Bienvenido Jesús,gracias por tu comentario;realmente este cielo de Luis es demasiado fuerte para adornarlos con palabras tiernas.Abrazo.
Publicar un comentario