lunes, 26 de octubre de 2009

Opresión

Sangre de paisaje
José Manuel Ciria
1999
óleo y grafito sobre lona


Sus pensamientos esconden fantasmas y heridas no reconocidas, ocultas en un rincón secreto, esperando que un golpe de magia las lance al aire y la sangre se volatilice, se esparza libre aunque todo se tiña de rojo, las miradas no sean amenazantes ni las palabras hieran, el sueño sea plácido y manso sin la intervención de la oscura química, el aire corra libre sin oprimir el pecho, los pasos avancen ligeros sin arrastrar los pies, el cuerpo se yerga sobre el centro sin encorvar la espalda y todo vuelva al sitio de donde no debió salir.

4 comentarios:

Alberto dijo...

Recuperación del yo?...al menos del orden que establece nuestra propia existencia?
besos

sigma dijo...

¡Que texto tan hermoso!.Quizás la liberación de la opresión empiece por reconocerla y simplemente apartarla,quizás mirando en otras direcciones, y de otro modo..., con más sencillez. Emocionante.¡Salud!

bambu222 dijo...

Alberto,no sé si se trata de recuperar el ¿yo?,o lo que los demás esperan que sea el yo,o como tú dices del "orden";veo a gente que sufre por salirse de esa delgada línea.Abrazos.
Gracias Sigma,me siento halagada por tu comentario.En cuanto a la opresión,¿qué mecanismos nos llevan a sufrir por tonterías aparentes?,también me apunto a la sencillez y al "aquí y ahora" como dice Michael D.aunque para llegar a ésto parece que hay que practicar mucho,lo bueno es que cualquier día te lo revela sin buscarlo.Besazos.

Gemma dijo...

Es como una imagen pasada a cámara lenta hacia atrás, del revés. De nuevo, una estampa esperanzadora.
(Y, entretanto, tus textos brillan cada vez más).
;-P
Beso