lunes, 8 de febrero de 2010

El ojo que todo lo ve

Biotherm
1990,
Jim Dine
Museo de Bellas Artes
de San Francisco.California.

Un señor sabelotodo observa insistente la pantalla mientras su mano recorre tu cuerpo con un aparatito que se desliza sobre un líquido pegajoso y transparente. Insiste en los huecos. Pesadamente se pasea intentando descubrir la huella de un tortuoso pasado no resuelto.¡Qué pesado!. No tenía que haber acudido a la cita. Además es tan callado, tan soso, tan anónimo, que da miedo.

2 comentarios:

Xocas dijo...

Hay personas que resultan tan frías y distantes como los objetos que manejan. Y mira que es difícil...

Abrazos

bambu222 dijo...

Hola,pues si,en este caso los distante y frio era el acto en sí
la chica que manejaba el ecógrafo era educada y hasta muy amable pero le ha tocado una misión no tan buena.Abrazo.