domingo, 26 de abril de 2009

Mirada acuosa

En la hierba
Max Klinger
aguafuerte y aguatinta
En otro lugar el rocío se posó sobre el césped refrescando la mirada del hombre huidizo, ofreciéndole una excusa para sus próximas palabras, alimentando su melancolía y su recuerdo.Tras el cristal contempla fascinado el nuevo espacio que se le ofrece.

2 comentarios:

Alberto dijo...

Innumerables perspectivas que puede dar un cristal. Innumerables escusas para contar su melancolía
Un abrazo

bambu222 dijo...

Alberto, supongo que habrás experimentado lo que se siente ante un cesped recién cubierto de rocío,creo que lo has captado perfectamente.Abrazo.